En todas las culturas humanas se le ha dado un valor importante a la placenta. Hay quienes la entierran al lado del fogón para que el bebe siempre tenga suficiente calor; hay quienes la entierran y siembran con ella un árbol; la consideran hermana gemela que dio su vida para que nazca nueva vida; la experiencia del nacimiento se vive como un ¨morir y nacer¨, y por lo mismo se le ofrece a la placenta ¨una buena muerte¨. También hay lugares, donde se come una parte o toda la placenta, igual como lo hacen la mayoría de los animales mamíferos; así se le reconoce su alto valor nutricional, hecho que hoy en día lo aprovecha la industria farmacéutica para ¨productos a base de placenta¨.

Sea cual fuese el sentido o la simbología, nosotros en Pakarii nos hemos propuesto de celebrar la vida en todas sus manifestaciones. Así entusiasmamos a las parejas a honrar la vida de la placenta, y a agradecerle que haya cuidado bien a nuestro hijo durante los nueve meses de gestación. A veces hacemos esta ceremonia en un circulo pequeño en casa. Y otras veces la hacemos entre varias familias en la casa pakarii. Quisiéramos que se recupere esta manera tan bella de celebrar la vida.